Título: Conejito
Género: Romance, fantasía
Advertencias:
Mis locuras ya son
cosa extrema 8D
Pareja:
TegoMass [Tegoshi
Yuya x Masuda Takahisa]
Fandom: NEWS
Palabras: 4,500
Tipo: One-shot
Resumen: ¿A qué grado podrían llegar los
celos de Tegoshi? Puede que una mascota signifique más que compañía.
- ¿Cómo te atreviste a comprar un
conejo, Massu?
- ¿Qué tiene de malo, Tegoshi? Tú
tienes un perro, Koyama tiene un gato… ¿Por qué yo no puedo tener un conejo?
- No entiendo por qué un conejo…
- Me gustan los conejos, son bonitos
y no son escandalosos.
- Son sucios.
- Todos los animales son algo
sucios.
- Se va a reproducir demasiado
¡Estarás lleno de conejos en menos de un año!
- Solo compré uno, y es macho, eso
no va a pasar si no le compro compañera.
- Te va a desordenar tu perfecto
orden.
- Le enseñaré a que no lo haga, es
un conejito muy pequeño. Puede aprender
- No quiero que tengas ese conejo.
- ¿Qué es lo que tienes en contra de
mi conejo?
- ¡Eso mismo! ¡Qué es un conejo!
Tegoshi se fue del apartamento de su
novio muy molesto, el mismo no entendía porque le fastidiaba tanto que el
pelirrojo tuviese un conejo como mascota, pensaba que con el tiempo el conejo
iba a requerir demasiadas atenciones y Massu no tendría el tiempo suficiente de
atenderlo a él y a su conejo, y como el conejo no puede hacer las cosas solo,
Massu lo dejaría quizás en segundo a término, como su novio. Tal vez era eso,
estaba celoso de poder perder la atención y mimos de Massu por un conejo.
“¿Por qué un conejo?” Se preguntaba el
rubio mientras paseaba por un parque cercano con las gafas de sol puestas, miró
a los niños jugar con un perro “Un perro sería imposible para Massu, de pequeño
uno lo mordió y a penas y tolera a Skull…”
Pensó en Koyama, quién también tenía
mascotas, Massu había dicho que él tenía un gato, y era cierto, una gata mimosa quién recibía todo el amor y afecto que Keii-chan
podía dar. “Massu no podría tener un gato, un gato es temperamental, y a Massu
le fastidiaría que no le deje dormir en las noches si es que se pone a maullar
como a veces nos platica Keii-chan que Nyanta lo hace…”
“Yo nací en el año del conejo… ¿Por
qué me fastidia tanto que Massu tenga un conejo?”
***
- ¿Un conejo? ¿Te compraste un
conejo, Massu?
Shige y Koyama no podían ocultar su
asombro en cuanto en la reunión de NEWS, Massu les mostró una foto de su
adorable conejito blanco con manchas café claro, era un animalito que cabía
perfectamente en la palma de la mano de Massu, y sus orejitas estaban muy
levantadas, como si quisiera posar a la cámara del teléfono de Massu.
Tegoshi no quiso ni ver la fotografía,
conocía al conejo en persona.
- ¿Verdad que es adorable?
- Vaya que lo es –Comentó Keii-chan,
quién había pedido a Massu que comentara a las fans mediante su blog que tenía
un conejo y anexara la foto. Cosa que Massu había accedido de buena gana.
- Me sorprende que comprases una
mascota, Massu –Comentó con asombro el más sensato de NEWS, pero en secreto le
agradaba la idea de que Massu se hubiese comprado una mascota, quizás él
también se podría comprar alguna mascota después.
- Creo que solo quería un poco de
compañía en mi apartamento –Mencionó el pelirrojo mientras escribía un par de
líneas para publicarlas en su blog.
- ¿Y cómo se llama?
Massu sonrió. Tegoshi dejó salir un
gruñido fastidiado y salió de la sala de ensayos de NEWS, Koyama y Shige,
rieron un poco, pero tampoco entendieron mucho ni las razones de Massu de
llamar así a su conejo ni tampoco las de Tegoshi al escuchar el nombre.
- Yu-chan.
***
- ¡Es que simplemente no lo entiendo
Keii-chan! –Se estaba quejando el rubio del grupo con el que hacía la función
de su madre, oyente, amigo y consejero.
- Es solo un conejo, no te exaltes
por ello.
- ¡Precisamente porque es un conejo!
Y además ¿Por qué “Yu-chan”?
- Quizás le pareció un buen nombre,
cuando crezca será Yu-kun –Dijo Koyama riendo un poco.
- Es que no lo entiendes…
- ¿Qué no entiendo?
- Que siempre le he pedido a Massu
que me llame “Yu-chan” cuando estamos los dos solos… Y nunca lo hace.
Koyama suspiró, la idea de que Massu
tuviese una mascota le sorprendía bastante, pero aunque en un principio le
había parecido buena idea, ahora le ponía a pensar ¿Por qué llamar a un conejo
de la forma cariñosa por la que Tegoshi quería ser llamado?” Consoló un poco al
que le hacía tantas travesuras pero que quería mucho, y luego fue a su casa, hablaría
con Massu también, ahora tenía más curiosidad que nunca acerca de este y su
nueva mascota.
***
Pese al conflicto interno de
Tegoshi, no quería estar peleado con su novio, entendía que él quisiera un
animal para tener cierta compañía y se sentía algo culpable porque aunque
llevaban casi tres años de novios no habían compartido mucho tiempo juntos,
entre los viajes constantes de Tegoshi, las actividades de ambos dentro de
Japón como miembros de NEWS, y el tiempo de descanso, a veces no se veían y
tenían un momento de “novios” como tal.
Dos noches después de que se enteró
del conejo del pelirrojo, decidió ir a pasar la noche con él, quizás así se
sentiría mejor y dejaría de sentir esa incomodidad y enojo por ese pobre conejo
que no tenía la culpa de nada. Siendo honesto, los conejos le gustaban y quizás
si dejaba de sentirse algo relegado por él, le tomaría cariño.
Massu no se extrañó de la llegada de
su novio y le agradó tenerlo con él, pasando ambos una bonita velada viendo un
película, tomados de la mano comiendo unas rebanadas de pizza, y aunque en un
par de ocasiones le puso pausa a la película en lo que Massu revisaba al
conejo, se sintió feliz de tener las atenciones y cariños de Massu.
La hora de dormir llegó, y Tegoshi
al no mostrar señas de querer irse, Massu lo llevó a su habitación para que
durmieran juntos, quizás esa noche no pasarían a más pero el tan solo hecho de
dormir juntos le hacía cierta ilusión a Tego.
Como el rubio iba con la idea de
dormir con él sacó de su mochila un atuendo sencillo y cómodo para dormir
mientras su novio se ponía un pijama, este le pidió que revisara de favor la
comida y bebida del conejito por si en la noche este requería de algo. Tegoshi
de mala gana accedió y fue a ver al animalito el cual ya medio se dormía en su
jaula, al ver que Massu no le llamaba para ir a la cama aún, decidió cargar un
poco al conejito.
Era bonito, mucho, adorable y
tierno, “Yu-chan” era un buen nombre, pero le contrarió tenerlo, suspiró y miró
la carita tranquila del conejo, sonrió un poco, “Tiene cierto encanto en sus
orejitas…” Fue lo único que pensó antes de volver a dejarlo en su jaula y
cerrarla bien.
Massu lo llamó a la cama y Tegoshi
no lo pensó dos veces, abrazó a su novio y dejó que este le llenara de besos en
su rostro, para luego el mismo darle la misma cantidad de besos a él, quedando
sus rostros muy cerca antes de que ambos conciliaran el sueño.
***
Massu se despertó primero a la
mañana siguiente, no realmente por la alarma o su reloj biológico, sino porque
sentía ciertas cosquillas en su cara, intentó apartar con los ojos cerrados
aquello que le molestaba y dormir un poco más, pero en cuanto lo quitó, volvió
a sentir la sensación. Repitió la acción pero obtuvo el mismo resultado, por lo
que se vio obligado a abrir sus ojos y descubrir lo que le molestaba en la
cara.
El grito que dio, despertó a Tegoshi
también.
- ¡Tegoshi!
- ¿Eh? –El pobre rubio, despertó
tallándose los ojos mirando a su novio quién lo miraba con incredulidad.
- ¿Qué te pasó?
Tegoshi se contrarió, a él no le
pasaba nada, había sido despertado por el grito de su novio por lo que no se
percató realmente del sentido de la pregunta de su novio, por lo que se estiró
un poco y llevó una de sus manos a ordenar su cabello… Esa acción fue la que lo
hizo gritar a él mismo.
- ¿¡Pero qué…?! –Tegoshi pasó su
mano por su cabeza, hasta que en parte superior de esta, a ambos lados sintió
cierta carnosidad que estaba seguro no tenía la noche anterior, razón por la
cual exigió un espejo a su novio. Massu no dudó ni un segundo en darle lo solicitado,
aunque fuese de mano, sin embargo seguía realmente sorprendido de ver a su
novio así.
La imagen que reflejó el espejo era
una muy buena broma, un espejismo o una pesadilla, Tegoshi no lo sabía, pero
ese par de orejas no eran normales, probó jalarlas pero le dolió hacerlo,
suspiró y se volvió a mirar en el espejo.
Eran alargadas, calculando podrían
medir algo similar a los 25 o 30 centímetros, curiosamente del mismo tono que su cabello,
las tocó y las sintió muy suaves, pese a ello se estremeció y estas se doblaron
un poco, se calmó un poco y estas volvieron a enderezarse, pero no mucho. Ahí
decidió ver a su novio el cual no había dicho ni pío.
- ¿Qué me hiciste, Massu? –Intentó no
sonar muy alterado.
- ¡Yo no hice nada! Cuando desperté…
¡eso me picaba mi nariz! –Massu señaló la cabeza de Tegoshi, pero obviamente no
era su cabello, eran ese par de orejas que parecían tan naturales que bien
cualquier habría dicho que Tegoshi siempre las había tenido, si es que los
humanos tuviesen las orejas así.
- ¿E-eso? –Tegoshi se contrarió y
sus orejas se irguieron un poco más.
- ¿T-tus orejas de conejo? –Massu preguntó
medio temeroso.
Tegoshi no habría querido admitirlo,
pero si, ese par de orejas parecían de conejo, demasiado largas para un conejo
normal, pero de un largo aceptable considerando las proporciones del cuerpo del
rubio, Tegoshi decidió levantarse, tenía que ver bien lo que el pasaba y el
espejo de mano podría estarle jugando una buena broma, o al menos así quería
pensar.
Pero más que la orejas, al
levantarse también se sorprendió y Massu incluso se contuvo una risita, Tegoshi
corrió al baño a comprobar que no solo sentía que algo había cambiado en su
cabeza… Resulta que medía unos 15 o 17 centímetros menos, cosa que Massu hizo
más evidente a pararse a su lado… Massu medía unos 5-8 centímetros más que Tegoshi
normalmente y estaba bien con ello, pero ahora Massu era básicamente una cabeza
y pico, más alto que él.
- ¿M-Me encogí?
Massu en respuesta lo abrazó un poco
y estando así lo levantó.
- Al parecer también perdiste peso.
¿Qué hiciste anoche, Tegoshi?
Tegoshi hizo un puchero, miró a
Massu y suspiró.
- No tengo ni la menor idea.
***
Massu tuvo que salir a comprar algo
de ropa para Tegoshi, la que traía le quedaba algo grande, no demasiado, pero
si había diferencia, mientras tanto el rubio se quedó en la habitación de su
novio sin querer salir para nada.
El pelirrojo le escogió ropa a su
novio y regresó, tras tener a Tegoshi ya vestido, decidieron desayunar. Eso
recordó a Massu que tenía que revisar a su pequeño “Yu-chan”, este estaba
jugando en su jaula, por lo que su dueño le llenó su depósito de agua y le puso
algo de comida.
- Lo tratas como un hámster –Tegoshi
comentó mordiendo un pedazo de pan.
- Es porque es pequeño aún, cuando
crezca lo dejaré salir de la jaula y sabrá donde tiene que comer y eso, mientras
que aprenda en su jaula –Massu comentó encogiéndose de hombros.
Tegoshi estaba balanceando sus pies
mientras comía, Massu por el contrario no podía dejar de verlo, le causaba
mucha curiosidad ver a su novio así de pequeño y con esas orejas, posiblemente el
menor quisiera olvidar el asunto de sus orejas pero Massu no podía pasarlo por
alto, y más porque… Le resultaba demasiado adorable.
- ¿Y qué vamos a hacer?
- ¿De qué?
- Ah, no sé, el trabajo, el hecho de
que hoy tenemos sesión fotográfica para la Duet a las 2 de la tarde, que vamos
a grabar un mensaje para la Johnnys.net y de que no podemos ocultar tus orejas
ahora mismo.
Tegoshi estaba por reclamar pero tan
pronto se exaltó el mismo se percató de cómo sus orejas se tensaron y se
levantaron todo lo que podían, este suspiró provocando que sus orejas se
bajaran de nuevo.
- Tienes razón pero… ¿Qué hacemos?
Massu lo miró con curiosidad y le
dio un beso en su frente, acariciando su mejilla y luego su cabeza, precisamente
entre las orejas de conejo que estaban algo caídas.
- Pensaré en algo Yu-chan, come
tranquilo.
Tegoshi se congeló en ese momento,
su novio nunca antes le había besado su frente, nunca le había acariciado así y
menos lo había llamado así, sonrió sin querer, tal vez el que haya tenido ese
cambio no era tan malo, por lo que comió su desayuno tranquilo. Mientras tanto
Massu se fue a arreglar, pensando en cómo lograr que Tegoshi pasara
desapercibido.
***
Hacer que Tegoshi pasara por ser
alguien discreto nunca ha sido posible, primero por la gran presencia que tiene
por sí mismo, derrama energía y se “siente” que él está en algún lugar, esto se
vio incrementado cuando su cabello pasó a ser rubio, pues ahora se hacía además
mucho más visible, su encantadora sonrisa, su expresión traviesa, su voz y
sobretodo su cabello lo hacían una persona muy notable, pasando por alto el
detalle de que no era exactamente muy alto.
Pese a la reducción de su estatura,
no daba la impresión de pasar desapercibido, al contrario llamaba más la
atención, Massu se estaba bañando y llegó a la conclusión de que al menos
Koyama y Shige tendrían que enterarse de la situación.
Les hizo una llamada telefónica,
pero solo a Koyama le dijo que Tegoshi se veía algo diferente y que necesitaban
de su ayuda, a Shige solo le exigió que fuera a su casa.
Cuando tocaron el timbre, Tegoshi
olvidó su condición y de manera muy normal fue a abrir, se dio cuenta de que no
debió hacerlo hasta que vio la cara sorprendida de Keii-chan, cosa que lo
impresionó a él mismo e hizo que nuevamente sus orejas se tensaran. Eso le dio
pauta a Koyama de sujetarlo y notar también lo delgado que estaba.
- ¡Tegoshi!
El grito fue lo que llevó a Massu a
la entrada de la casa y suspiró. Hizo pasar a los recién llegados e hizo que se
sentaran los cuatro en la sala.
- ¿Qué pasó exactamente? –Shige es
quién más se veía necio a creer que pasaba.
- No lo sé, sus orejas fueron lo que
me despertaron hoy –Massu dijo mirando a su novio, este se avergonzó un poco y
de manera involuntaria sus orejas reaccionaron tapando un poco su rostro, cosa
que a Keii-chan y a Massu les pareció adorable.
- No lo entiendo… Pero de alguna
manera me da la impresión de que Tegoshi siempre ha tenido las orejas así, digo…
no se ve mal… ¿O sí? –Koyama habló.
- ¡No es normal Keii-chan! ¡Da igual
cómo se vean, no es nada normal! –Tegoshi habló meneando su cabeza. Para el
mayor de NEWS no tenía validez su argumento, cada vez le parecía más adorable
Tegoshi.
- De todas maneras, hoy tenemos
trabajo, a la Duet le podremos decir que hagamos una sesión con temática de
animales porque Tegoshi quiere usar un disfraz, y seguramente les gustará la
idea… Pero ¿Y el vídeo de la Johnnys.net? –Shige sin querer ya había dado una
idea, pero pasó por alto la estatura del menor del grupo. Los 15 centímetros se
notaban demasiado.
- ¡Podríamos tomarnos selfies!
¡Selfies con temática de animales! –Sugirió Koyama deseando usar unas orejas de
gato. Massu no decía nada pero admitió internamente que la idea era buena.
Tegoshi se cruzó de brazos, de nuevo
lo iban a dejar solo en el apartamento, se irían a buscar las orejas que
querían usar mientras que él cuidaba al conejito de Massu, nadie se podía
quedar con él porque según ellos “Debían buscar algo que les combinara tan bien
como a él el color de sus orejas con el cabello rubio”.
***
El conejito de Massu sí que sabía
ser adorable, Tegoshi lo sacó de su jaula y le acarició sus orejitas. “A ti sí
que se te ven bien…” pensaba y el conejito se puso a jugar con él.
Estaba con él en mano cuando escuchó
el timbre, ahora tendría que tomarse fotos en ese estado, como si quisiera
recordarlo por siempre, pero lo otro era cancelar la sesión o salir a la vista
de todo el staff de la revista así.
Recibió a los demás, Massu traía en
una bolsa lo que usarían cada uno: orejas de gato para Koyama, de oso para el
pelirrojo y unas orejas de mono para Shige. Les ayudó a ponérselas y admitió
que tenía suerte de que sus compañeros de grupo le ayudasen a pasar desapercibido
de esa manera, en ellos no se veían tan naturales como en él, porque obviamente
no lo eran, pero si daban esa impresión en las fotografías.
Sacaron varias y Koyama fue el
encargado de enviarlas a la revista tan pronto como hubieron terminado, y pese
a que tuvieron problemas para sacar fotos grupales, en parejas e individuales
fue mucho más fácil.
Tegoshi salió en casi todas las
fotos, y hasta se dio la libertad de levantar y mover sus orejas a voluntad
para parecer adorable en esas fotos, no tenía que esforzarse demasiado, lo era
y Keii-chan era el más encantado de tomar esas fotos.
***
Para el vídeo de la Johnnys.net
aplicaron una situación similar, consiguieron un banquito para Tegoshi y lo
hicieron subirse en él, ya que solo grabarían de la cintura para arriba, le
hicieron bajar sus orejas y le pusieron una chaqueta con todo y su gorro,
filmaron el vídeo con el fondo de la pared blanca de la sala de Massu.
Ahora era Shige quién se encargaría
de llevarlo a la agencia. Cuando el par de invitados se fue Tegoshi se dejó caer
en el sofá, algo exhausto. Massu al verlo suspiró y besó su mejilla.
- Todo va a estar bien, Yu-chan. –En
todo el día, desde el desayuno Massu no le había llamado así. Pero sonrió de
escucharlo y Tegoshi volteó para ver bien a su novio.
- Eso espero… No puedo ser un Idol
desde tu casa, Massu… -El pelirrojo sonrió.
- Tienes razón, pero niega que hoy
la has pasado bien.
Tegoshi tuvo que admitir que fue un
buen día. Massu le dijo que le prepararía un baño y que se sentiría mejor, el
menor aprovechó el tiempo y se relajó mirando la televisión, tenía que recobrar
su fuerza y ánimo de siempre, no podía excusarse en ese extraño hecho de que
sus orejas fuesen modificadas.
Cuando su baño estuvo listo corrió a
besar a su novio en sus labios antes de entrar a la tina y luego ir a la cama
con él. Massu lo admitió solo para sí “Es más adorable ahora”.
***
Para desgracia de Tegoshi sus orejas
seguían con él esa mañana. La ventaja es que tenían el día libre.
- ¿Quieres desayunar fuera, Yu-chan?
–Massu le preguntó y antes de que Tegoshi protestara por la propuesta, Massu le
aventó un par de gafas de sol, y la chaqueta con la que había salido el día
anterior en el vídeo de la Johnnys.net, si bien sus orejas aún se notaban a las
laterales, eran más fáciles de disimular. Por esa razón, Tegoshi se dio el lujo
de salir tomado de la mano de Massu, quién también iba algo encubierto.
El ánimo de Tegoshi se iba
recuperando y su actitud egocéntrica se hacía presente segundo a segundo, a Massu
le gustaba estar con él, no le era difícil llamarlo “Yu-chan” e incluso besó
sus mejillas y sus labios en un par de ocasiones, sin pena de que alguien los
viera o los descubriese. No había forma de que pasara, Tegoshi no parecía
realmente Tegoshi, por su estatura y complexión más delgada.
Compraron un poco más de ropa para
Tegoshi, quizás no la utilizaría pero según Massu no podían arriesgarse a no
tener ropa para él si es que su condición no mejoraba en ese par de días.
A Tegoshi cada vez le importaba
menos tener sus orejas, le importaba menos ser más pequeño que Massu, le
importaba menos su condición: Massu lo consentía y le procuraba más. Incluso se
portaba algo más caprichoso que de costumbre y Massu no decía absolutamente
nada, solo le complacía.
***
La noche llegó y ellos ya estaba de
nuevo en el apartamento de Massu, Tegoshi se deshizo de las gafas de sol y la
chaqueta, sus orejas estaban algo entumidas por lo que las acarició un poco y
luego las estiró.
- ¿Te duele? –Massu preguntó
curioso, pero Tegoshi negó, diciendo que solo necesitaba tenerlas libres un
rato.
Massu en ese momento ya no se pudo
contener, abrazó a Tegoshi, lo cargó en sus brazos y se lo llevó a la
habitación.
- ¿Qué haces? ¡Massu! –Se sorprendió
el pequeño rubio hasta ser acomodado en la cama, no había duda, Massu tenía
ganas.
***
Los labios de Massu se deleitaron
besando los de Tegoshi, este a penas y podía reaccionar, en parte no entendía
en lo absoluto la reacción del mayor, cierto era que ese día habían estado los
dos muy cariñosos y se habían comportado como el par de novios que eran pero
nada le había dado pauta de que Massu querría tener relaciones con él. Al menos
no hasta que lo cargó y lo acostó en la cama.
Massu no se explicaba tampoco el
deseo que sentía por su novio, ni siquiera estaba seguro si este querría hacer
lo que él tenía en mente, pero por su respuesta pensaba que tenía su permiso
para continuar. En un principio el pelirrojo solo besaba apasionadamente al
menor, el cual reaccionaba casi instantáneamente, sin embargo la tentación por
tocar al rubio crecía dentro del mayor a cada segundo.
Fueron las manos de Massu poco a
poco a ir tocando por encima de la ropa a Tegoshi, sus brazos y su espalda,
incluso sus costados, pero lo que Massu se moría por tocar eran las largas y
suaves orejas del menor ¿Fetiche nuevo? Tal vez. Pero Massu quería comprobar
que tan erógena le resultaba esa zona a su novio.
Tegoshi no cabía en su gozo, solo
Massu le sabía tocar de esa manera tan perfecta y experta. Le estimulaba poco a
poco y eso hacía que Tegoshi fuera sintiendo un deseo todavía mayor, no tenía
ni idea de que había “prendido” a Massu, pero agradecía que así fuera, sentía
ese calor entre ambos tan intenso como hacía meses no lo sentía.
Las caricias del pelirrojo pronto
alcanzaron el rostro de su novio, y sin dudarlo acarició su cabello, Tegoshi no
advertía lo que el mayor quería hacer, sin embargo no se quejó en cuanto sintió
los labios del menor besando sus orejas. Al parecer eran especialmente
sensibles al tacto de los suaves labios de Massu.
- Conejito.
Eso susurró tiernamente el mayor
cuando estuvo besando las orejas de Yuya, este se estremeció y gimió un poco.
- ¿Sabías que podemos jugar a que
soy un lobo con ganas de comer conejo, Yu-chan?
Yuya soltó una risita nerviosa, si
Massu se pondría en ese plan se llevarían gran parte de la noche jugando, pero
eso le llamaba mucho la atención. Por lo que solo asintió incluso moviendo sus
orejas, el mayor sonrió y atacó a Yuya. No sobra decir que fue más de una vez,
en más de una posición. Siempre acompañado de dulces “Te amo”, palabras que
solo se decían uno al otro en los más puros momentos de intimidad. La pasión en
su caso no estaba separada del amor y cariño que se tenían.
***
Para la mañana siguiente fue Yuya
quién intentó despertar a besos a su novio, picándole sus mejillas
juguetonamente con una de sus orejas, no le gustaban demasiado pero podría
usarlas para jugar con su novio, quizás se podría acostumbrar a ellas. Sin
embargo Massu estaba profundamente dormido. “¡Alimentaré a Yu-chan!” Se levantó
con ese pensamiento.
Bajó de la cama para buscar al
conejito, el cual estaba inquieto en su jaula, le miró y sonrió un poco.
- Tal vez tu deberías cambiar de
nombre, Yu-chan… -Comentó mientras llenaba de agua el recipiente del conejito –
Mis orejas incluso son más lindas que las tuyas –Dijo a broma.
- No estoy muy seguro. –Dijo Massu parándose
detrás de su novio.
- ¿Eh? ¿Este conejo sigue ganándome?
¿Incluso después de lo de ayer? ¡Te divertiste “cazando” al conejo!
Massu rio y besó la frente de Yuya. Le
llamó con un suave “Yu-chan” para ir a desayunar dejando al conejito solo
disfrutando de su comida.
- ¿Y qué haremos con sus orejas,
señor Yu-chan?
- No lo sé, aunque no están tan mal…
Las fans podrían acostumbrarse a ellas~.
- No quiero que nadie te vea así,
Yu-chan.
- ¿Por qué? Si no encontramos como
volver a la normalidad yo… bueno no puedo quedarme siempre aquí.
- En ese caso será mejor que dejes
de estar celoso de mi conejo y despertar ya de este sueño, Yuya –Massu dijo con
seriedad antes de besar los labios de su novio.
***
Agitado Tegoshi despertó de su
sueño, Massu dormía plácidamente a su lado, se tocó la cabeza y sus orejas
estaban normales, no tenía nada encima ni se sentía más pequeño, lo comprobó
incluso levantándose de la cama, parecía estar todo en orden y miró al pequeño
Yu-chan de la jaula, acercándose a él, le sonrió un poco y le tocó su cabecita.
- Lo siento, Massu es mío… Pero
admito que serás buena compañía para él… Realmente eres adorable, Yu-chan.
Massu murmuró entre sueños el nombre
del rubio y Tegoshi decidió volver a la cama, sin embargo cuando se subió en
esta encontró un par de orejas falsas de conejo, casi del tono de su cabello
bajo la cama. Miró al mayor y sonrió un poco.
- A veces realmente eres un
fetichista, Massu.
Puede que se equivocara, pero
seguramente Massu no había comprado y llamado al conejo “Yu-chan” porque sí o
porque realmente quisiera una mascota. Puede que haya querido ponerlo celoso a
propósito y quién sabe, quizás no solo el Massu de sus sueños quería jugar al
lobo y al conejo en la cama. Lo que Massu no sabía era que seguramente jugarían…
a primera hora de la mañana.
Owwwww!!! Tambn lo creí tan real!! Jajajaja awwww tan tierno!!! Te quedó muy bueno Yuzu!!! Awwww me gusta mucho!! Quiero más y más!!; jijiji gracias!!
ResponderEliminarMuchas gracias por leer y comentar <3
EliminarMe alegro que ye haya gustado, pensé que sería una idea rara cx
Ooooo hermoso divertido y genial esta súper yuzu as más gracias x hacernos reír gracias att.( yuki)
ResponderEliminarMe alegra que te haya hecho reír~ xD
EliminarGracias por leer y comentar cx!
Ooooo hermoso divertido y genial esta súper yuzu as más gracias x hacernos reír gracias att.( yuki)
ResponderEliminarMe gusto mucho en verdad :D era tan real el sueño de Tessi y en verdad que se hace notar, me lo imagine de conejito y seria super adorable, aunque quizás Massu se pondría mucho más celoso porque a las fans nos gustaría más y el solo es suyo :)
ResponderEliminarMe gustan tus fics aunque a veces no comento, lo siento. A si y cuando continuaras el de "enséñame las estrellas" por favor continuarlo en verdad me gusto mucho :D
bueno gracias por la etiqueta :D
Si Tego de conejito es adorable xD no me resisití e hice unas ediciones poniendole orejas de conejo y se ve lindo xDDD
EliminarGracias por leer, como y te dije, por tí continuaré ese fic, no pasa de este año! lo juro por mi amor a Massu y a Tego lol
Owwwww!!! Tambn lo creí tan real!! Jajajaja awwww tan tierno!!! Te quedó muy bueno Yuzu!!! Awwww me gusta mucho!! Quiero más y más!!; jijiji gracias!!
ResponderEliminarIba a comentar desde ayer, pero mi tablet no me lo permitio xD.... pero ahora lo hago (?)
ResponderEliminarAwww!, que lindo fic, tan tierno >u<, no se más raro hubiera estado q Tego se hubiera convertido completanmente en conejo xD ... jejejejeje.
De verdad en el sueño de Tego como que los NEWS tomaron demasiado normal la situación, digo, si yo despertara con semejantes cosas en mi cabeza gritaria todo el día :o ... creyendo de verdad que me fume algo como para verlas y sentirlas xD.
Ese final me dejo mucho a la imaginación (?) xD.
Espero escribas más así. ♥
Es que en otro fic ya lo había convertido en un perro xD, por eso solo ahora las orejas xD(???) ok, no haha pero según yo se vería lindo xD
EliminarSi, los Nyusus se lo tomaron bien xD, están acostumbrados a las rarezas de Tego que el par de orejas ya no era mucho (?
En fin gracias por leer <3 y por tu comentario, me gusta mucho leer lo que piensas mis fics ><
Jajaja awwws estuvo súper tierno, y ese Masu bien pervertido con su fetiche a las orejas <3 me encantó! Muchas gracias Yuzu ♥
ResponderEliminarYo sé que realmente Massu es un ser muy fetichista (?) xDD
EliminarGracias a tí por leer y comentar <3