martes, 23 de octubre de 2012

El Arte de Engañar (1/??)

Con dedicatoria especial a Fa~
Te lo debía, y aunque había dicho Shot por toda la tardanza será un fic~ Tú NishiKato~!!

Disfrutlao mucho que enterito va para ti~


Arte de Engañar.

Cada día regresaba más estresado, la vida de un abogado no es fácil, bien lo dijo mi madre, que yo me metía en un lío al dedicarme a esto… “Como Idol sería todo más fácil” solía decirme cada vez que podía tras haber dejado la Johnny’s poco después de haber debutado con un grupo muy numeroso con el líder de los que éramos Juniors. “El peor error de tu vida”… completaba.

Pero pese a todo el trabajo yo estaba muy satisfecho de todo, tenía buenos amigos y ganaba bastante bien. Así que no me importaba mucho la opinión de mi madre.

Al llegar a casa me tumbé sin pensar mucho en el sofá, olvidando que llevaba un traje que no debía arrugar y que tenía hambre… Sin embargo el cansancio era mucho; había ganado un caso tras haber estado “peleando” por tres exhaustivos meses de no dormir bien, viajar e investigar mucho, y aunque el jugoso cheque de mi billetera lo compensaba en gran medida; el desgaste físico era inevitable… caí dormido al poco rato de tumbarme ahí.

No sé cuánto dormí pero cuando desperté ya era de día, más concretamente la tarde, “Vaya, al parecer hoy falté al trabajo”, cosa que comprobé al ver los mensajes al localizador que dejé en “vibrador” toda la noche. No importaba, merecía descansar.

Pasé el día como “amo de casa” le dediqué tiempo a arreglar mi casa, lavar ropa, preparar y comer algo como se debe, hice limpieza y luego vi toda la tarde películas pensando en que podría hacer con la buena cantidad de dinero que había recibido en pago.

Cené un poco de café y me fui a dormir tranquilo, había sido un buen y relajado día, sin reclamos, ni llamadas, ni mensajes, ni cosa que se le parezca –Quizás a que apagué el localizador, la portátil, el móvil y demás- que pueda molestar… O eso pensé.

Alguien en la noche llegó exigiendo que le abriera la puerta, a fuertes gritos y aún más fuertes golpes a mi pobre entrada de la pequeña casa de la que disponía. No quería levantarme hasta que los gritos se transformaron en gemidos y lloriqueos… era un hombre ¿Qué querrá? ¿Por qué me buscaba a mí? Me dormí sin darle vueltas al asunto.

Desperté temprano y desayuné tras haber tomado una ducha, tenía tiempo, mi vida era fácil… con ciertos problemas pero no tan graves como los creía mi madre; Todos tenemos problemas, unos más grandes que otros pero siempre con solución. No recordé de los golpes ni de esos gritos hasta que cerré la puerta de mi casa… y no había rastro de nada ni nadie. Pensé que lo soñé y me fui a trabajar.

Papeleo, unos cuantas firmas y nada más… Pese al estrés y pocas horas de sueño me gustaba la actividad de “Pelear” en algún caso; más cuando llevas “Desventaja” así es más satisfactorio ganar.

De cualquier manera, el día transcurrió con normalidad y la secretaria sexy que infinitas veces se negó a ayudarme o siquiera a hacerme caso, me ayudó gustosa en lo poco que tenía que hacer: lo cual me puso inesperadamente feliz.

-Eso sería todo por hoy, Kato-san.

-Gracias por su ayuda, Kushieda-san, si usted hubiese salido más tarde.

Ella sonrió y me preguntó si me podía acompañar a mi casa, a lo que con una sonrisa de lado acepté. Estaban saliendo las cosas inesperadamente bien ese día, tanto que olvidé el percance de la noche pasada. Kushieda-san me hizo acompañarla a varias tiendas y luego tras cierto tiempo pasamos a una cafetería, cuando ahí descubrí que estábamos en una cita. “Qué distraído” me dije sonriendo. Pese a que ella me pidió que la dejase acompañarme a casa terminé siendo yo quien la llevara a su casa.

-Hasta mañana Kushieda-san

-Hasta mañana, pero ya no me diga así… -Dijo de manera que no esperaba, casi anda formal y hasta en extremo femenina y un poco infantil.

-¿Cómo debería?

-Keiko

Se me hizo extraño esa confianza, tal vez ahora ella notaba mi atractivo… Sin embargo asentí pero le pedí que siguiera llamándome “Kato”. Todo perfecto, buen trabajo, buena paga, y una secretaria hermosa me pretendía.

Me fui a dormir y en la noche volví a oír los gritos… que cesaron como la noche pasada y al día siguiente como si nada. Tres días más, fueron así… el cuarto día ya me dio miedo y salí a ver:

-¿Quién eres?

-¿Shige? –Me dijo con voz llorosa-

-¿Quién eres? –Repetí ahora un poco más temeroso… Me conocía, pero yo a él no.

-Sé que no me recuerdas… Pero déjame quedarme contigo, sólo en ti puedo confiar…

-¿Ryo?

-Me alegra que me recuerdes…

-¡Fuera de aquí!

Cerré la puerta, no dejaría que él se metiera en mi vida de nuevo. Más lamentos incomodos, ahora gritaba mi nombre, ya era embarazoso, me fui a la cama, deslizando la llave de la puerta de entrada por debajo de esta, una manta en el sofá y subiendo corriendo a encerarme en mi habitación.

Me arrepentiría estoy seguro. 

domingo, 21 de octubre de 2012

TegoMass no Mahou [Sub Español] Concierto+Encore

Pues al fin por lo que todo mundo y su perro rogaba!
¡TegoMass no Mahou con subs en Español!
¿Cuántas ya lo querían y deseaban? yo no había ni visto el concierto~ XD Pero ahora que lo he visto estoy feliz *-*

Bueno pues paso a paso les diré como descargar~

1.- Unete a la comunidad Pinku District Fansub

2.- Es importante que sigan los siguientes pasos, que indica la dueña del LJ : ¿Cómo unirse?

3.- Una vez ya unidas con su respectivo comentario pueden ir aquí; TegoMass no Mahou [Sub Español]

Y listo~ Ya pueden empezar  DESCARGAR~

Por favor comenten~! Esta chica se ha esforzado mucho y ha sido un trabajo hermoso >.< Además todas ya deseabamos este proyecto~

Aún falta el documental pero ya es menos ¿no? Wa! Mi espera que les guste >.<

jueves, 11 de octubre de 2012

Kis-My-Ft2 5to Single "Ai no Beat"

Estos no se cansan... ¡Hagan sus cuentas! ¿Qué han sacado este año? 
1.- SHE! HER! HER!
2.- Kis-My-1st
3.- Kis-My-Zero
4.- Kis-My-Mint-Tour
5.- WANNA BEEEE!
6.- Shake It Up!

Más doramas, más película, más teatro, más viaje por India...!!
Pues estamos en octubre y ya anunciaron su nuevo material;

"Ai no Beat"

Contará con 3 ediciones:

Limited Edition Type A [CD+DVD]
CD
1.- Ai no Beat -Dance version-
2.- Ai no Beat -Rock version-
DVD
1.- PV "Ai no Beat" -Dance version-
2.- Making off "Ai no Beat"

Limited Edition Type B [CD+DVD]
CD
1.- Ai no Beat -Dance version-
2.- Ai no Beat -Rock version-
DVD
1.- PV "Ai no Beat" -Rock Version-
2.- Making off "Ai no Beat

Regular Edition [CD]
1.- Ai no Beat -Dance version-
2.- Ai no Beat -Rock version-
3.- Winter love

La fecha de lanzamiento es el 14 de noviembre.

Pues yo ya quiero la canción y estaré pendiente de portadas y eso~ :D

martes, 2 de octubre de 2012

Enseñáme las estrellas (1/?)

no es que haya dejado lo demás~ Pero esto se me vino hoy~ Tenía que escribirlo...
Tengo un trauma ya~ XD



Enséñame las estrellas.

Nunca pudo ver, ni un poco. Sus ojos por preciosos que eran nunca lo dejaron ver esas cosas maravillosas que el mundo tenía, ni tampoco la luz ni mucho menos los rostros que más apreciaba, los de su pequeña prima y los de sus padres.

Pese a eso, nunca mostró ningún problema, era feliz así, pues constantemente se decía que su discapacidad lo hacía aún más perfecto porque… él podía ver todo imaginándolo, a su manera y a sus colores, todo lo podía imaginar y gracias a las bonitas y detalladas descripciones de su prima, podía conocer muchas cosas.

Su discapacidad nunca fue problema, estaba acostumbrado… No a la oscuridad… No al miedo, no porque siempre alguien lo acompañaba, generalmente su madre o su prima. Vivía mimado como todo buen hijo de familia la familia real, cosa que indudablemente lo hacía el más egocéntrico príncipe de la historia. Se creía a sí mismo un propio tesoro nacional… Y su familia alimentaba esa idea.

La vista era su único defecto si es que ese detalle se consideraba; tenía un cuerpo atractivo un rostro de ángel, cabello suave y un poco largo, un aura encantadora y atrapante, ese príncipe desprendía un aroma único y un tono de voz realmente encantador. El sueño de toda chica… y de todo chico, también posiblemente.

Su vida transcurría con mucha tranquilidad y sin ningún tipo de problemas graves, era muy consentido, su “defecto” se compensaba en gran manera con dos dotes especiales que tenía; su perfecto sentido del oído y su maravillosa voz, así que no es de extrañar que amase la música con locura.

Era un compositor, sabía usar su guitarra que aprendió a tocar gracias a su prima y su maestro particular. Nadie podía intentar si quiera competir con el nivel de maestría que tenía para sus canciones. Al grado de que semanalmente componía una canción aún más hermosa que la anterior.

“Tesoro Nacional”.

-¡Yuya-sama!

-Akari-chan, te he dicho que no me llames así –suspiró el príncipe con sus ojos como siempre cerrados, el cual estaba sentado con su guitarra- ¿Qué necesitas?

-Perdona, Yuya-sama pero madre ha dicho que así le llame, y ella es quién lo solicita.

-¿Madre? –Dijo el ciego príncipe-

-Su majestad, la reina, tú madre, Yuya-sama.

El príncipe se puso de pie, dejó su guitarra a un lado y con una seña apenas perceptible, Akari se acercó, tomándole de la mano y como siempre, lo guió, el sólo caminaba, ya que ella, le avisaba de escalones, muros, personas o alguna mascota. Cuando llegaron al destino, en esta ocasión con la Reina, el príncipe dio como siempre las gracias con una sonrisa hermosa. Ella se ruborizó y le hizo una reverencia que aunque sabía que no la vería, sentía que era necesario.

La Reina miró con aprobación el gesto y sonrió, para cuando Akari se disponía a irse le llamó.

-Los dos deben oír esto.
El príncipe se sorprendió, ella aún más. La Reina sonrío y se acercó a los jóvenes.

-Mi príncipe, ¿Cuántos años tienes? –Le dijo con cariño la Reina.

-Tengo 23 años, madre.

-¿Y mi sobrina hermosa, Akari-chan?

-Tengo 19 años, mi señora Reina.

La mujer sonrío ampliamente tomó las manos de ambos jóvenes y las unió. El joven príncipe sintió lo que se venía al igual que Akari, él se asustó, ella… se ilusionó. Por ello el príncipe huyó de ahí al escuchar “Ustedes dos serán los nuevos reyes”.

Se encerró en su habitación, realmente molesto. No quiso salir a comer ni a pasear por el jardín, ni jugar con su perrita.

-¿¡Por qué!? ¡Soy el gran tesoro nacional! Yo… no puedo estar con mi prima… Me da asco, no puedo sentirla como una mujer… ¡Es mi prima! O más bien como mi guía. Nada más –Repetía una y otra vez, enfadado, a veces gritando y otras susurrando.

La Reina no daba crédito. El Rey, autor original de la idea, tampoco y la pequeña Akari menos. “Ya se le pasará”, dijeron.

Una semana, dos semanas, tres semanas… Un mes y llegaron los dos.

No había habido nuevas canciones, nadie veía al príncipe, él no se dejaba ver. Ni por su hasta entonces guía y más cercana compañía; Akari, la cual estaba en depresión. Pero el apuesto príncipe ni de broma toleraría tanto tiempo sin hacer algo. Escapó una tarde.
Sin ser visto pero cuidadoso como nunca salió al jardín… o eso creía.
Se paseó con cuidado y tropezando a cada momento. Estaba fastidiado. Cayó.

-¿Está bien? –Una voz melodiosa sonó.

-Sí, lo estoy –Contestó el príncipe desde el suelo aún.

-¿Le ayudo?

-Es obvio.

Unas manos grandes y cálidas lo ayudaron a levantarse.

-Eso no le pasaría sí abriera los ojos para caminar, aunque… ahora yo a duras penas veo.

El príncipe se notó molesto. ¿No sabía quién era? “Ignorante”, pensó.

-¿No sabes quién soy? –Inquirió el príncipe con aire superior.

-Un chico renuente a abrir los ojos.

“No vale la pena”. Dijo para sí el príncipe “¿Dónde estamos?” Dijo. La otra voz tardó en contestar tanto que el príncipe le exigió: “llévame al palacio”

-No.

-¿Eh? ¿Por qué? –El príncipe estaba mostrándose enfadado.

-Ya es muy tarde, lo llevaré  mi casa.

Y antes de mostrar resistencia, una mano lo jaló y no pudo poner resistencia.

-Hoy la noche está muy bella. Las estrellas brillan mucho –Dijo esa voz.

-¿Qué es una estrella? –Dijo curioso el ciego príncipe, cuando ya casi llegaban a la casa de quién lo ayudaba.

-Algo hermoso.

-Se más explícito, yo soy hermoso y no soy estrella –sintió entonces como lo hacían ingresar a un lugar pequeño y cálido.

-Es verdad pero es difícil de explicar y sería fácil si… –Dijo la amable voz- Abre los ojos…

-No.

-¿Por qué?

-¿En verdad no sabes quién soy?

-Ya te lo dije, mi príncipe, alguien renuente a abrir los ojos.

-¡Soy ciego…! –Dijo este, sorprendido.

-Aun así tienes que abrir los ojos y verás.

-¿Eres mago o qué para decir eso? –Dijo molesto el príncipe.

-No soy mago, ni brujo, ni médico, soy Takahisa Masuda… un plebeyo, mi príncipe.

El caprichoso príncipe se quedó en seco. Suspiró y pidió la cama del dueño. Este a gestos se la cedió. La noche pasó. Y no fue Akari quién despertó al príncipe Yuya… fue:

“Futari kiri no kouren…”

La última canción que había escrito.