AZT:Medicamento
C4D: Nivel de células de inmunidad
*más detalle en inter*
Gomen!
Capítulo
21
Soñé que
todo estaba bien, soñé que Tegoshi comía conmigo en un buen restaurante, soñé
por tan sólo unos momentos que vivía tranquilo, sin problemas, soñé que todo
era normal, obviamente era un truco de mi ente para escapar de la realidad que
me había propuesto enfrentar, pero que no estaba seguro de poder afrontar.
-Lávate la
cara y cámbiate… -Me dijo Ueda.
-Estoy
seguro de que no pasará nada en ese tiempo, venías a ducharte ¿no? –Nakamaru.
-Pero me
dormí, perdí tiempo…
-¡Masuda! –Dijeron
los dos.
-¿Qué?
-Esta bien
que te preocupes por Tegoshi-san pero cuídate tu también, te dejamos dormir
porque seguro pasaste la noche en vela ¿No
es cierto?, eres alguien que tiene buen corazón, necesitas descansar, si
Tegoshi supiera que no te cuidas por su culpa… ¿no crees que se sentiría
triste?
Me quedé
callado, Nakamaru dijo todo eso, también concordaba en que Tegoshi se
preocuparía, concordaba en que me preocupaba mucho por él, pero… sólo eso podía
hacer, tal vez Nakamaru ni Ueda lo entendían porque ellos no lo vivían
directamente, pero… a fin de cuentas los obedecí… los obedecí porque no quería
ver la cara de Tegoshi sintiéndose culpable, lo hice desganadamente, me quería ir ya, me
cambie por otro conjunto deportivo, esta vez era de color azul marino, me
enjuagué la cara me sentí fatal, tenía sueño todavía, pero ya no había tiempo.
En una
mochila Ueda y Nakamaru metieron cosas de aseo personal, un poco de ropa y
algunas revistas:
-No
esperamos ni sabemos que las llegues a utilizar, es sólo prevención.-Dijeron
juntos.
Les sonreí,
eran buenos amigos, ellos no tenían la culpa ni necesidad de estar ahí, pero sin
embargo ellos ahí estaban apoyándome, ellos también se habían hecho amigos de mi
novio, y se los agradecía, tomé y me puse la mochila al hombro, les sonreí y
salimos del cuarto a toda prisa, las escaleras las bajamos más rápido que nunca
y pronto ya estábamos tomando el metro para llegar al hospital, la espera es
eterna, y hartante, pero no hay remedio.
Al llegar
vimos sólo a mis vecinos, Nishikido y Shigeaki, antes no me percaté de su presencia,
supongo estaba cansado, cuando me vieron su expresión mejoró, pero seguía
siendo mala, les pregunté por Yamashita y Akanishi, ellos se habían ido a
comer:
-¡Tardaste!
–Dijo mi vecino Nishikido.
-Lo… lo
siento
-Ryo-chan,
dale un respiro, se ve cansado –Era Shigeaki.
-¡Pero…!
-¡Ryo-chan!
Estoy seguro que esta muy mal ahora, cállate y digámosle lo que nos dijeron sus
familiares…
-¿Familiares?
-Tegoshi ha sido trasladado a otro hospital
Me caí de la impresión, me levantaron entre Shigeaki y
Ueda, les pregunté varias cosas, no me supieron responder más que el nombre del
hospital al que lo llevaron, no me di cuenta de que estaba llorando ya.
-¿Por qué se lo llevaron?
-Porque al parecer este hospital ya no cuenta con los
recursos para atenderlo…
Las voces de los demás me parecían desvanecerse ¿Por
qué?, me sentía fatal, pero no era el momento de entrar en depresión, les di
las gracias y me dirigía salir de ese hospital inútil que no pudo ayudar… ahí
sólo lo entretuvieron… no es más bien que yo no quiero aceptar que Tegoshi
empeora cada vez más, estoy en la parada del edificio inútil en el que pasé la
noche, espero un taxi, veo uno y le hago la parada, siento una mano en mi
hombro, luego alguien abre la puerta y sube, me empujan para que yo también
suba, luego dos personas más y una en frente, parecemos el auto sardina, pero
sonrío, no estoy sólo a fin de cuentas, Nishikido que es el que va en frete da
el nombre del hospital y le vi un brillo en los ojos del taxista, nos sacaría
un buen dinero, estaba lejos, pero sinceramente o importaba, el viaje no se me
hizo tan largo, tal vez por las sonrisas y algunos de los comentarios de mis
amigos, les daba las gracias por eso.
Llegamos y Nakamaru pagó todo, no me quiso decir cuanto
fue, tal vez esa era su forma de ayudar, no perdí tiempo y entre el lugar tan
rápido como pude, era un hospital particular, muy bien equipado y moderno,
costoso seguramente, pero si era ahí donde lo podían atender estaba perfecto,
entre a la sala de espera, -muy distinta
a la del otro hospital –estaba sumamente ansioso, miré por todos lados, buscando
algo, no sé que pero buscando, vi a Maki-san, la prima de Tegoshi, le sonreí y
ella a mí, corrí hacia a ella aunque casi me caía, ella me ayudó a parar.
-De verdad debe preocuparte ¿No es cierto?
Me contó que Tegoshi había tenido una hemorragia
interna, no la había podido controlar y por eso mismo había sido trasladado, le
miré, ella parecía simularlo todo muy rápido, no parecía afectarle mucho, la
señora estaba sentada, inmóvil ¿También ya lo aceptaba?, yo simplemente no
podía si quiera pensarlo. Me dejé caer en una silla a su lado, ella puso una
mano en mi hombro:
-Estamos esperando que nos diga que ya tienen
controlado todo, cuando eso pase… podrás ir a verlo, aguanta ¿Si?
Lo dijo de una manera tan dulce que sólo pude asentir,
otra vez a esperar, no tenía hambre, no tenía ganas de nada más que de ver ya a
Tegoshi, llegaron al fin mis amigos, estaban todos preocupados, Maki-san les
contó todo porque yo no era capaz de emitir palabra alguna del asunto, me sentí
mal conmigo mismo ¿Cómo puedo ser tan débil?, no lo sé… al poco rato llegó
Akanishi y Yamashita, ellos estaban al tanto así que sólo me saludaron, empezaron
a platicar entre ellos, Shigeaki-san y Nishikido-san desaparecieron un rato del
lugar y luego regresaron, se les notaba cansados… pero no le di importancia,
las horas pasaban, los chicos iban y venían, ellos no tenían que estar ahí,
¿Cuántas clases ya habrían perdido por esto?, bueno pero si les decía algo
seguro se lo toman a mal.
Seguimos esperando, ya eran las ocho de la noche, vi a
un doctor que se dirigía a la señora que estaba a mi lado, le dijo que por
ahora estaba estable pero que tenía que hablar con quienes habían vivido con
Tegoshi en un tiempo de cuatro meses antes de estos terribles acontecimientos,
me señaló sin decir palabra, yo sólo me levanté y me acerqué, el doctor me hizo
seña de que lo siguiera, así lo hice, me condujo por un laberinto, pero
llegamos una habitación, supuse que era
de Tegoshi, nuevamente era una privada, el hospital no quería contagios
inesperados…
Entramos y Tegoshi estaba consiente, se alegró al
verme, yo también le sonreí, el doctor cerró la puerta tras de sí, yo fui a
lado de Tegoshi, sentirlo me hacía en verdad feliz, su débil sonrisa me
alegraba de muchas maneras, pero el doctor estaba serio.
-Tegoshi-san… este chico…
-Es Takahisa Masuda, vive conmigo en la universidad, es
mi novio.
Me sonrojé cuando me presentó, así, era alguien directo…
Pero eso también me fascinaba de él, doctor dio un suspiro.
-¿Sabe de…?
-Esta
enterado de todo.
-Ya veo…
Masuda-san ¿Verdad? ¿Desde cuando sabe esto de Tegoshi-kun?
Noté el
gesto de molestia de Tegoshi, ahora entendía porque odiaba tanto que le dijesen
‘Tegoshi-kun’, pero no le di mucha importancia, le tomé la mano y me senté en
una silla que estaba a lado de la cama.
-Desde
ayer.
El doctor
miró algo enojado a Tegoshi, pero mi novio lo ignoró.
-¿Entonces
no sabe de su tratamiento?
Tegoshi
bajó la mirada, yo no entendía ¿El SIDA tiene tratamiento?, bueno sé lo básico,
no estoy seguro de lo que sé pero… Tegoshi ¿Se trataba de verdad?, yo le miré,
seguía con la cabeza baja, me estaba evitando.
-Yo…
-El no sabe
ni que el SIDA tiene tratamiento, doctor –Era su voz, débil, algo tranquila
pero no grata.
-Entiendo…
-El doctor parecía ahora molesto –Sabe Masuda-san, estar con alguien con este
virus es muy peligroso, usted sabe, el contagio… bueno cualquier cosa
-¿Es usted
prejuicioso? ¿Por besarlo me contagiaré? Hasta yo sé que no, doctor, diga lo
que quiera decir sin rodeos –Estaba francamente molesto, no era nadie para
decirme si era seguro estar con él, dañaba a Tegoshi como nunca nadie lo había
hecho, yo no podía permitir que si quiera le diera oportunidad de comentar algo
que no debía.
-No se alarme,
yo sólo digo…
-¿Qué
quiere? –Dijo Tegoshi.
-Bueno no
has seguido el tratamiento de AZT ¿Verdad?
¿AZT?, ¿Eso
era medicina?, ¿De verdad servía de algo? Tegoshi no contestó, el doctor
suspiró, pero yo no entendía… este tipo ya me caía mal, que mal inmunólogo,
¿así se llaman no?, los que tratan esta enfermedad debería ser más tranquilos
con sus pacientes.
-¿Cuándo fue
tu último análisis de C4D?
Tegoshi permanecía
sin contestar, el doctor se impacientaba, apreté la mano de Tegoshi, no sé que
cara tenía yo pero debía ser lo suficientemente mala como para que Tegoshi accediera
levantar la vista y enfrentar al doctor, este se mantenía serio, yo no sabía
que hacer, soy un cobarde.
-Dejé el tratamiento
en cuando entré a la universidad, no quería vivir con esa cosa que ¡Sólo me da
falsa esperanzas!, en cuanto a los análisis, tiene como unos ocho meses que
hice los últimos, aquí es demasiado caro ese estudio… Además, yo no quiero
preocupar a nadie, ya me cansé de tener esto, no quiero morir, pero ya no
quiero sufrir.
-Yuya…
-Susurré tan bajo que sólo yo me escuché.
-Pues,
Tegoshi-kun le practicaremos los análisis, los necesitamos, tal vez sea demasiado
tarde, necesito hablar con su madre
también, ¿O este joven puede autorizar algún estudio?
-¡Claro!
Taka-chan puede autorizar lo que se pueda
Me
sorprendí, jamás me había llamado así, pero no me molestó, le sonreí como pude, era lo mínimo que podía hacer.
-Bien, sólo
dígame… ¿Cuál fue el resultado de su último C4D?
-No quiero.
-¡No es
cuestión de querer!
Tegoshi
odiaba a ese doctor o le dolía hablar del tema, tal vez las dos, nuevamente le
apreté la mano, quería darle confianza y valor.
-Fue de 200…
El doctor
palideció y se fue, no se me hizo adecuado preguntar nada, sólo le dejé, se
durmió y yo supongo que también, cuando alguien me despertó era una enfermera,
me pedía que despertase a Tegoshi para que le sacase sangre, así lo hice,
estaba de mejor humor y se le veía con más vida, platicamos por horas, de todo
menos la situación actual, no saqué nunca el tema de conversación, ya investigaría
más tarde.
Le llevaron
la comida a Tegoshi y me invitó, no era muy rica pero como teníamos hambre se
acabó rápido, sonreía como si estuviéramos
en un día de campo, o de vacaciones, disfrutando de todo, amaba ver sus
sonrisas, era como si se nos olvidara todo esto, pero al entrar una enfermera o
escuchábamos algo por el altavoz del hospital regresábamos a la cruel realidad.
Fueron tres
días así, yo permanecía con Tegoshi todo el tiempo posible, poco tiempo era el
que pasaba con su madre o con los chicos, o con su prima, pues apenas se cumplían
quince minutos y ya me quería a su lado, para mi era mejor.
Creía que
tenía más fuerza, creía que estaba mejor que nunca, le besaba muy seguido, la
frente, el cabello, los labios, todo lo que pudiese y cuanto pudiese, en el cuarto
día me llamó el doctor tras haber terminado nuestro desayuno compartido.
-Masuda-san…
-¿Qué
sucede?
-Tengo los
resultados de Tegoshi-kun no son muy buenos.
-¿Qué
quiere decir? –Me asusté, había estado bien en estos días... No podía tener
nada grave ¿O sí? No era imposible.
-Es un
milagro que siga vivo.
-¿Eh?
-Sus
niveles rondan en 90, cualquier cosa lo mataría.
¿Cómo podía
ser tan directo y frío?
-Además…
-Continuó -¿Usted sabe que en realidad el SIDA no mata verdad? Debilita el
cuerpo para que algo acabe con su vida…
-…
-Tegoshi-kun
contrajo cáncer de sangre, tiene leucemia.
Sólo una cosa: morí. Mi Tego no merece esto... por qué!!! ahhhh~~ -se pega un tiro-
ResponderEliminarSus amigos son tan buenos u.u pero pobre Tego ;OOOOO; se va a morir ya me lo espero... Massu muere con él.!!!!!!!!! Que bonito Yuzu, es trágico pero así debe de ser no? Comento poquito para dividir los comentaios entre el blog y el foro :3
ResponderEliminarYUZUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU FKASFSD,FSADFSAFF
ResponderEliminarleucemia! lo que faltaba! *se golpea con la pared* mi pobre yuya T^T
ay Dios, qué triste es esto, primero SIDA y ahora leucemia, qué más les va a pasar?!!
ResponderEliminar